Lo que empezó haciendo por simple afición se está convirtiendo con el tiempo casi en una forma de vida. Antonio Ojeda, un visueño amante de las fotografías, empieza a ser conocido por su ‘espontaneidad’ y por el uso del blanco y negro en sus fotografías.
Viendo muchas fotos y practicando. Así es como Antonio Ojeda ha ido haciéndose fotógrafo, aunque insiste que “más por afición que por profesión”. Sea como fuere, es la forma de expresar y transmitir sentimientos que tiene un visueño cuyo trabajo no pasa por desapercibido, especialmente por su tendencia hacia la fotografía en blanco y negro. “No sé el motivo, quizá porque me ha gustado siempre el cine en blanco y negro, por ese componente artístico que la de color no tiene. Casi todo mi trabajo es así”, asegura.
Las redes sociales le han ayudado a conocer y también a ser conocido. En este sentido, su apuesta es clara por la fotografía de calle. “Es más pura y auténtica. La espontaneidad, y la mínima edición posible”. Es su campo de trabajo.
A pesar de su crecimiento, Ojeda no se plantea ningún reto más allá de seguir “disfrutando con las fotos, que son mi pasión, y así quiero seguir, lo que venga después, se verá con el tiempo”, apunta. Por cierto, Sevilla y Lisboa son sus ciudades preferidas para hacer sus fotos, “por la luz y por la mezcla de moderno y antiguo” que presentan estos enclaves. Ojeda ha participado en exposiciones colectivas en lugares como Madrid, Londres o Praga, entre otras ciudades.