El colectivo ecopacifista pide que se cumpla con la normativa urbanística y medioambiental y exige la construcción de una depuradora.
Solano da por hecho que Paviso está funcionando porque “el trasiego de camiones y el humo que sale de las instalaciones le delata” pero asegura que lo está haciendo “de manera ilegal” y ante el beneplácito del Ayuntamiento.
Así se desprende de un comunicado, en el que el colectivo ecopacifista llega a la conclusión de que Paviso está funcionando “sin licencia, incumpliendo la normativa urbanística y ambiental”, aprovechándose, continúa, “de la confianza que tiene con algunos políticos visueños y le ha metido un gol en fuera de juego al Ayuntamiento”, señala.
Unas dudas que recogen en este escrito y que hicieron que Solano, en diciembre del 2016, solicitara al Ayuntamiento “información de interés público”, en relación a las pertinentes licencias de obras y de actividad además de la prevención desde la empresa por el impacto de su actividad con el medio ambiente. Desde entonces, Solano afirma que no se le ha respondido, por lo que denuncia “la callada” por respuesta de un gobierno, añade, “que mira hacia otro lado y que llegó al poder prometiendo participación, transparencia y lucha contra la corrupción”, detalla.
Desde Solano se exige, como así recoge en la normativa, que Paviso, ante su actividad para elaborar harinas y concentrados alimentarios, “debiera tener una depuradora” para gestionar sus residuos sólidos “y ésta no existe en sus instalaciones”, apunta el comunicado. “La racanería y la falta de escrúpulos ambientales de esta empresa le ha llevado a no construir la depuradora que le exige la Junta para evitar la contaminación del acuífero”, subraya, y pide que de no cumplir con la legalidad, “se abra expediente sancionador y de protección de la legalidad urbanística, como se suele hacer con cualquier vecino”, finaliza.
