Otro gran pregón de Manuel García

Manuel García en un momento del pregón.

A las 12 de la mañana se abrían las cortinas del escenario del salón de actos de la Casa de la cultura, dejando al descubierto el precioso escenario montado para el Pregón de las Glorias de María. 

Tras la interpretación de la popular marcha ‘Pasan los campanilleros’, interpretada por la banda de Santa María del Alcor, tomaba la palabra José Manuel Jiménez para presentar al pregonero, un Manuel García que comenzó recordando su etapa de monaguillo de la Patrona y dedicando su texto a su madre Marina.

Luego tuvo palabras para la reciente Semana Santa de Sevilla, y a una de sus santas, Santa Ángela de la Cruz. El Corazón de Jesús tuvo su momento, así como la Inmaculada Concepción de María como dogma importante de la Iglesia. También animó a seguir rezando el Santo Rosario recordando a su Virgen del Rosario de San Vicente de Sevilla.

Un emotivo pregón que tuvo parada especial en el convento del Corpus Chirsti, con el Cristo de la Misericordia y la virgen de la Merced. La virgen de los Reyes quedó patente como una de sus mayores devociones, con un repaso a sus peregrinaciones a Sevilla y resaltando la belleza serena de la Virgen.

Más adelante el pregonero se detuvo en la Virgen del Carmen, de la que dijo era su «musa soberana» para la inspiración. Uno de los momentos más emotivos fue con las palabras dedicadas a la Virgen del Rocío, recordando primero esos caminos del pasado que él hizo con Villamanrique acompañando a su padre. Fue entonces cuando sonó el tamboril y la gaita con el paso de carretas entre bastidores. Igualmente hubo una poesía y una dedicatoria a la Virgen de los Dolores y remató su texto con la parte dedicada a Santa María del Alcor.