Un jurado popular presidido por Mercedes Alaya enjuiciará al acusado de matar a su inquilino con unas tijeras

La magistrada Mercedes Alaya.

Será este miércoles y la Fiscalía pide una pena de prisión de 12 años por un delito de homicidio doloso. 

Un jurado popular enjuiciará a partir de este miércoles al hombre acusado de matar en noviembre de 2015 a un joven marroquí de 32 años al que tenía alquilada una habitación de su vivienda tras clavarle unas tijeras de cocina en distintas partes de su cuerpo.

Fuentes judiciales han informado a Europa Press de que el jurado popular estará presidido por la magistrada Mercedes Alaya y se constituirá este miércoles en la Audiencia Provincial de Sevilla. En su escrito de acusación la Fiscalía pide para J.P.S., a cuenta de un delito de homicidio doloso, 12 años de prisión y el pago de una indemnización de 19.172 euros a los padres de la víctima y de 47.931,33 euros a cada hijo menor del fallecido.

El Ministerio Público relata en su escrito de conclusiones que los hechos ocurrieron entre las 1,00 y las 2,00 horas del día 18 de noviembre de 2015, cuando se produjo una discusión entre el investigado y la víctima, a quien el primero había alquilado días atrás una habitación en su domicilio .

Al parecer, y según relata la Fiscalía, la discusión con el fallecido, identificado como H.E.K., «giró en torno al dinero del alquiler» que debía al acusado, razón por la que éste le había echado de la casa. Así, el acusado impidió la entrada al domicilio a la víctima, comenzando una discusión y un forcejeo entre ambos en el transcurso del cual el fallecido causó diversos destrozos en la casa y le tiró un par de vasos de cristal al imputado, dándole uno de ellos en la cabeza.

Como quiera que el finado siguió sin marcharse, el acusado cogió unas tijeras de cocina que tenía encima del mueble peinadora de su dormitorio y, «con evidente ánimo de acabar con su vida», se dirigió a la víctima cuando estaba en la puerta de entrada y se las clavó varias veces en la zona del cuello, tórax, brazo izquierdo y un dedo de la mano derecha, causándole la muerte.

De este modo, el cadáver presentaba cuatro heridas inciso punzantes realizadas con las tijeras, tres de las cuales fueron realizadas con las tijeras abiertas y la última con el arma cerrada.

Las heridas causadas en el cuello y el tórax afectaron a distintos órganos como el pulmón o la vena yugular y provocaron unas lesiones vasculares que ocasionaron la muerte por hipovolemia aguda debido a la «masiva» hemorragia producida.

La víctima, asimismo, presentaba otras heridas compatibles con lesiones de defensa y lucha ante la agresión «directa» del encausado con las tijeras, según expone la Fiscalía en su escrito.

Fuente: Europa Press