Investigado un vecino de El Viso como presunto autor de varios incendios provocados

La Guardia Civil investiga a un vecino de El Viso del Alcor, de 67 años, como presunto autor de varios incendios provocados que se habrían iniciado en diferentes puntos de la campiña de Los Alcores, hasta donde se desplazaba en vehículo de alquiler, y que han causado cuantiosas pérdidas económicas a los propietarios de los cultivos.

Según se detalla en una nota de prensa, en el incendio producido en la madrugada del 24 de mayo en la localidad visueña, resultando quemadas unas 20 hectáreas de cultivo de cereal, la Guardia Civil del Puesto Principal de Los Alcores, «tras una intensa investigación, ha logrado reunir pruebas suficientes para atribuir la autoría del hecho» al citado individuo. A raíz de este incendio, en el que hubo al menos cinco perjudicados por grandes pérdidas económicas, se comenzó a realizar unas indagaciones que se han prolongado durante casi un mes.

La información conseguida y los datos aportados por personas que también presenciaron parte de la secuencia de los hechos ha permitido a la Guardia Civil tomar declaración en calidad de investigado a L.G.S., quien se acogió a su derecho a no declarar. Los aspectos más a destacar de la investigación se centran en que el inicio del fuego se habría producido en varios puntos y que el presunto autor operaba con un vehículo de alquiler. Finalmente, concluidas sus investigaciones, la Guardia Civil ha hecho entrega de las diligencias en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Guardia de la localidad de Carmona.

Dado que se han constatado un elevado número de incendios en la zona, los cuales se repiten año tras año, con claros indicios de que muchos de ellos pueden haber sido provocados intencionadamente, la Guardia Civil no sólo ha aumentado la vigilancia de las zonas rurales de la demarcación, sino que ha intensificado el esfuerzo en obtener datos de interés que puedan aportar información útil para la prevención o para el esclarecimiento de este tipo de delitos que «constituyen un peligro real, tanto para el patrimonio de pequeños agricultores como potencialmente para la vida de las personas».