El nematodo, también llamado globodera, es un organismo nocivo de cuarentena en la Unión Europea, que en España se encuentra regulado por el Real Decreto 920/2010 que establece un programa nacional de control de este organismo nocivo.
Al ser un organismo nocivo de cuarenta, desde la Consejería de Agricultura de la Junta de Andalucía tienen la obligación de impedir que se siga expandiendo por el territorio de la Unión Europea (UE). Más teniendo en cuenta que uno de los cultivos más afectados por este organismo nocivo es la patata, base de la alimentación en todo el territorio de la UE.
En El Viso del Alcor son tres explotaciones agrícolas las que han dado positivo en las prospecciones realizadas por la Consejería de Agricultura y en estas tres explotaciones se encuentran afectados ocho parcelas de patatas, según Rafael Sánchez Trujillo, Ingeniero Agrónomo, responsable del Servicio de Sanidad Vegetal.
Este organismo nocivo, que se convierte en plaga, se encuentra en el suelo. Sánchez Trujillo afirma que, concretamente en el caso de la patata, “forma unos nódulos en las raíces o pueden estar adheridos a los tubérculos, limitando el funcionamiento del sistema de la patata provocando que la planta sea más pequeña, pudiendo incluso llegar a morir. Y los tubérculos que producen van a ser mucho más pequeños, lo que va a reducir drásticamente la producción de una parcela que esté afectada”.
Las parcelas en las que se ha encontrado nematodo se declaran oficialmente contaminadas y se inscriben en un registro de la Consejería de Agricultura. Desde la Consejería se le informa al agricultor de esta situación a través de una resolución, en la que se incluyen una serie de medidas fitosanitarias que éste debe cumplir.
La principal de las medidas a tener en cuenta es que está totalmente prohibido cultivar patata para hacer semilla, es decir, “no podemos cultivar en una parcela afectada patata que está destinada a ser semilla en otra parcela porque con ello moveríamos el nematodo a parcelas que no están contaminadas”, según Sánchez Trujillo.
Por otro lado, sí se puede cultivar patata para el consumo, aunque el responsable del Servicio de Sanidad Vegetal, asegura que “lo ideal sería no cultivar patata ni ninguna de las otras plantas huéspedes de este nematodo (pimientos, tomates, fresas, etc.) para que el organismo no encontrara una fuente de alimentación y las poblaciones decrezcan”.
También se pueden utilizar productos nematicidas, rotar con cultivos que no son plantas huésped del nematodo o utilizar un cultivo trampa, es decir, un cultivo que se implanta para activar el nematodo y una vez activados, se retira el cultivo matando el nematodo.
La Junta de Andalucía ha realizado estas prospecciones durante los meses de mayo y junio y no en todas las explotaciones agrícolas, por lo que no dudan que pueda haber más parcelas afectadas.
Aquellos que incumplan las medidas de control a seguir para evitar su propagación se verán sometidos al régimen sancionador de la Ley de Sanidad Vegetal. Habrá tres tipos de sanción:
- Leve, de 300 a 3.000 euros
- Grave, de 3.001 a 120.000 euros
- Muy grave, de 120.001 a 3 millones de euros
Es preciso señalar que este organismo tan sólo es nocivo para los cultivos, no para la salud de las personas. Es totalmente seguro ingerir patata cultivada en una explotación afectada.
Por último, Sánchez Trujillo asegura que el nematodo y el ePitrix, también llamado “pulguilla de patata”, son dos organismos nocivos de los cultivos totalmente diferentes y la forman en la que se trata también.