Tras tres meses de negociación y trámites burocráticos, el Ayuntamiento ha llegado a un acuerdo para formalizar la compra de los terrenos de la antigua Invirsa. Para realizar esta operación, que comenzó al iniciarse el nuevo mandato, el gobierno socialista se puso en contacto con el Instituto Catalán de Finanzas —actuales propietarios de Invirsa— para llegar a un acuerdo viable y que Invirsa pase a ser propiedad municipal.
El Ayuntamiento pagará 430.000 euros por esta propiedad, contando con seis meses para realizar dicho pago y proceder a la escritura pública del edificio. La idea del gobierno local es destinar este terreno al uso de distintos medios municipales como «la Policía Local, el Juzgado de Paz y las naves de Servicios Generales«, así como reservar un espacio de unos 5.000 metros «para lo que se podría llamar Palacio de Congresos y en él realizar actividades que no tienen cabida en nuestro municipio actualmente».
Santos ha declarado sentirse satisfecho con esta operación y ha adelantado que el Ayuntamiento pretende, en los próximos años, llevar a cabo este proyecto «a través de inversiones financieramente sostenibles e inversiones propias del Ayuntamiento».