La Guardia Civil ha detenido a 11 personas e investiga a otras 2 por robo y hurto de cítricos, estafa, pertenencia a grupo criminal, desobediencia grave (los investigados han incumplido el confinamiento) y delitos contra la salud pública (por las condiciones insalubres del transporte de la mercancía, las instalaciones donde guardaban la fruta intervenida y porque los investigados carecían de certificado de manipulación de alimentos. Además, uno de ellos fue identificado conduciendo sin permiso de conducir. También se imputa un delito de receptación, ya que el receptador tras la toma de la declaración indica que la fruta que ha comprado a esta organización es vendida en fruterías de Sevilla, sin concretar ninguna, y que ha utilizado furgonetas con el logotipo de su empresa de frutas para así pasar desapercibido.
Los hechos se remontan a finales de enero de este año, cuando agentes del Equipo ROCA de la Guardia Civil de Carmona intercepta de madrugada y en las proximidades de El Viso del Alcor, un todo terreno cargado de mandarinas. Los agentes, tras interrogar a los ocupantes sobre la carga, no pudieron obtener datos sobre la procedencia, por lo que abrieron una investigación. Una investigación que en un primer momento se centró en determinados vecinos de Torreblanca y Mairena del Alcor que, de forma habitual y de manera organizada, hurtaban cítricos en explotaciones agrícolas de la provincia de Sevilla y Huelva en vehículos todo terreno a los que les maximizan la zona de carga.
Tras vigilar domicilios, movimientos de vehículos y personas sospechosas, se detectó que el grupo lo forman, al menos, 12 personas y que guardaban la mercancía sustraída en un inmueble en desuso en El Viso del Alcor. Una vez descubiertos los integrantes y el modus operandi, los investigadores se centraron en identificar el lugar que recepta las grandes cantidades de fruta sustraída por estos individuos. En una de las vigilancias se detectó cómo se realiza un trasvase de cítricos a una furgoneta vinculada a un mayorista de fruta de la localidad visueña. Ambos vehículos realizaron la operación, que duró algo menos de una hora, en una finca rústica y posteriormente se dirigieron al casco urbano de El Viso del Alcor, estacionando a la altura de la empresa que se sospecha que recepta la mercancía.
Ya entrado el mes de abril, y decretado el Estado de Alarma, con el obligado confinamiento de personas, la Guardia Civil intensifica la investigación, llegando a realizar vigilancias sobre los objetivos durante 24 horas ante la posibilidad de que pudieran estar introduciendo naranjas sustraídas en el circuito del comercio legal. En una de esas vigilancias, los agentes sorprenden uno de los vehículos sospechosos cuando realiza una carga de naranjas en cajas para su venta al mayorista investigado. Los agentes localizan unos 1.500 kilos de naranjas en el inmueble abandonado que usaban de guardería y en el que evidencian suciedad, chatarra y animales entre la fruta.
La Guardia Civil estima la cantidad de fruta robada desde el inicio de campaña de unos 60.000 kilos y de 4.800 kilos la fruta intervenida, con un valor aproximado en total de 21.000 euros. Los daños producidos en las diferentes explotaciones agrarias son valorados en unos 4.000 euros. La fruta fue destinada a la destrucción indicándose por el Ayuntamiento que ese inmueble sería demolido para evitar que se repitan este tipo de hechos.
